Treinta y cinco ciudades de todo el mundo se comprometieron, el pasado 11 de octubre, a mejorar la calidad del aire que respiran sus habitantes, que superan en conjunto los 140 millones.
La lista de ciudades incluye, entre otras, a Berlín, Heidelberg, Lisboa, Madrid, Barcelona, Copenhague, Nueva Delhi, Guadalajara (México), Jakarta, Los Ángeles (EE.UU.), Lima, Lisboa, Londres, Medellín (Colombia), Milán, Quito, Seúl, Estocolmo, Sydney, Tokio y Washington.
En la cumbre de alcaldes del C40, que reúne a representantes de 94 metrópolis en Copenhague, los firmantes reconocieron que respirar aire puro es un “derecho humano” y se comprometieron a trabajar juntos para formar una “coalición global sin precedentes por el aire limpio”.
Su iniciativa les insta a aplicar “objetivos ambiciosos de reducción de la contaminación y a poner en marcha importantes políticas” al respecto de aquí a 2025. Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), nueve de cada diez ciudadanos en todo el mundo respiran aire de mala calidad diariamente, y cada año mueren 7 millones de personas por la contaminación atmosférica, la mayoría pertenecientes a las comunidades más pobres y vulnerables.
Los firmantes, que se comprometieron a publicar los progresos para alcanzar sus objetivos, calculan que se podrían evitar 40.000 muertes cada año reduciendo la media anual de concentraciones de partículas al aire libre PM 2,5 (con un tamaño inferior a 2,5 micras) a los niveles recomendados por la OMS.
Un estudio difundido por el C40 estima que si todas las ciudades del grupo optaran por un transporte, edificios e industrias “limpios”, las emisiones de gases invernadero disminuirían un 87% la concentración de PM 2,5 casi un 50%; y se impedirían más de 220.000 muertes prematuras al año.
Entre las herramientas de las que disponen los gobiernos municipales para mejorar la calidad atmosférica, los firmantes mencionaron la expansión del transporte con bajas o cero emisiones, promover combustibles para calefacción y cocina más limpios e incentivar el uso de la bicicleta.
Algunas acciones en la dirección correcta
Según explicó el alcalde de Copenhague y anfitrión de la conferencia C40, Frank Jensen, la declaración muestra cómo las ciudades pueden actuar como actores críticos cuando se trata de proteger el medioambiente. "La contaminación del aire es un problema global, pero tiene una solución local", afirmó. "No queremos que esta declaración siga siendo un simple eslogan", agregó. "Actuaremos con contundencia".
Copenhague ha luchado contra la contaminación del aire durante muchos años y planea convertirse en la primera capital del mundo climáticamente neutra para 2025. Este año, la ciudad ha puesto en servicio 400 autobuses eléctricos y planea electrificar sus transbordadores para el próximo año. Para 2030, Dinamarca prevé reducir sus emisiones de CO2 en un 70%.
Otras ciudades también están comprometidas a mejorar la calidad atmosférica. En París, por ejemplo, donde la calidad del aire está por encima del promedio, la alcaldesa Anne Hidalgo ha declarado la guerra a los automóviles. Desde julio, los vehículos diesel registrados antes de 2001 ya no pueden conducir en el centro de la ciudad. Hidalgo también planea prohibir todos los automóviles con motores de combustión en el centro de París para 2030. El "Grand Paris Express", un nuevo ferrocarril circular, se está construyendo, en la actualidad, alrededor de la ciudad y tendrá conexión con la red de líneas de metro. En 2014, la ciudad también comenzó un programa integral de plantación de árboles y desde entonces ha plantado 15.000 árboles nuevos.
Los Estados miembros de la UE exceden repetidamente los límites de calidad del aire
En la UE, las emisiones de gases de escape están reguladas por la Directiva de calidad del aire de 2008, que fue complementada cinco años después por el denominado paquete de aire limpio, el cual establece valores máximos para contaminantes y establece objetivos de reducción para 2020 y 2030.
Sin embargo, las ciudades y regiones han excedido repetidamente los valores máximos permitidos. Como lo muestra el último informe de calidad del aire de la Agencia Europea del Medio Ambiente, el 19% de las estaciones de medición en 19 Estados miembros excedieron los niveles de PM10. Esto corresponde a los diez micrómetros, el nivel más alto de partículas gruesas.
Cuando se trata de partículas PM2.5, el promedio diario fue 5% más alto. Como resultado, el 42% de todos los europeos en las ciudades están expuestos a niveles de partículas que exceden las recomendaciones de la OMS.
En mayo pasado, tras repetidas llamadas a la acción contra la contaminación del aire, la Comisión Europea sancionó a seis Estados miembros de la UE. Alemania, Francia y el Reino Unido no habían logrado reducir sus niveles de dióxido de nitrógeno, mientras que Hungría, Italia y Rumania habían excedido repetidamente los niveles de PM10.
Fuente: Economia Circular